Aquí, una crónica de lo acontecido el fin de semana y lo que le sucedería al Callao de llegar una ola gigante.El viernes, una alerta en el puerto del Callao debido a un sismo en Japón provocó un tsunami que arrasó con tierras niponas y puso en aviso a toda la población chalaca, pues todo el litoral del pacífico se vería afectado por posibles repercusiones. Gracias a dios, no pasó de un susto.
El viernes fue un día de gran tensión para todo el pueblo chalaco. Todo empezó con un terremoto de 8,9 grados en la escala de Ritcher que azotó al país asiático del Japón aproximadamente a las 2:26 pm (12: 26 am hora peruana). El desastre natural duró 30 segundos y es considerado el peor
sismo del país del sol naciente en los últimos 140 años; al cierre de esta edición hay cientos de fallecidos y decenas de peruanos desaparecidos.
Ante este hecho, durante la mañana se tomaron medidas debido a las posibilidades que el maremoto formado llegué al litoral peruano con gran intensidad.
A primeras horas de la mañana, el Gobierno Regional del Callao impidió el acceso de bañistas a las playas chalacas. Con el paso del tiempo, las prevenciones fueron mayores y decidieron suspender las clases de los colegios de inicial, primaria y secundaria en todo el Callao. Esta
medida fue tomada para cuidar la integridad de los más de 150 mil alumnos que asistían ese día a la escuela. Además el equipo más popular del Callao , Sport Boys, decidió suspender su entrenamiento.
El Ministerio de Salud, Óscar Ugarte, informó a los medios que se había decidido decretar en Alerta Amarilla en los hospitales de todos los departamentos de la costa en caso de cualquier emergencia. “Con esto se comprende que los hospitales tendrán el mayor número de camas
disponibles, alistarán los equipos electrógenos y de transporte. Además preparamos medios para mantenernos comunicados entre hospitales. Hay que mantener la calma, Defensa Civil y La Marina de Guerra del Perú siguen monitoreando. Ojalá que no ocurra nada”.
En La Punta y Chucuito, zonas de mayor riesgo debido a su cercanía al mar, fueron evacuadas a partir de las 3 de la mañana del mismo día.
Además se tuvo conversaciones con Edelnor para cortar la luz con el objetivo de evitar daños mayores y cortocircuitos que podía ocasionar el contacto del agua de mar con la energía eléctrica. En el caso de las personas discapacitadas y adultos mayores de la tercera edad fueron
ayudados en su desplazamiento a las zonas de refugio.
La tensión fue en aumento cuando se confirmó que habría presencia de Tsunamis en toda la costa del pacífico. Los medios internacionales informaron sobre la evacuación de los pobladores de la isla de Estados Unidos, Hawai.
Mientras en la provincia constitucional del Callao estaban en alerta. el capitán de la compañía de Bomberos número 34, Carlos Rodríguez Montañés, declaró para Prensa Chalaca: “Nosotros estamos preparados, y para ayudar a la gente toda la noche hemos monitoreado y coordinado con alerta medica, tenemos todos los implementos adecuados para cualquier
eventualidad. Además dos miembros del cuerpo tienen experiencias en desastres naturales, incluso en el huracán Katrina”.
También la Policía Aérea puso a disposición dos helicópteros para vigilar la zona desde Callao hasta Cañete mientras el mar presenta alguna anormalidad y así cuidar a la población que evacuara.
En el caso del Centro Preventivo del Niño y Adolescente La Punta número 2 se llevó a las adolescentes a un albergue en una zona de mayor seguridad debido a que se encuentran en sector de riesgo.
Con la confirmación de que las olas del tsunami no causaron grandes daños en Hawai se estipuló que aquí ocurriría en menor impacto.
El capitán de Fragata Atilio Aste, responsable del Sistema Nacional de Alerta de Tsunami de la Marina Guerra del Perú, declaró que las olas serían de aproximadamente un metro pero que en caso de puertos cerrados este tamaño podría aumentar. También se pronosticó que el maretazo
llegaría a La Punta a las ocho y cuarenta; no obstante, el estado de
alerta continuaría hasta las 9 de la noche.
Con el paso de las horas, el ambiente se tranquilizó e incluso el Vicepresidente de la Región Callao, el General Walter Mori, manifestó que no era necesario evacuar.
Sin embargo el Presidente de La República, Alan García, declaró que el Perú es un país que se encuentra casi en las antípodas de Japón, por lo que exhortó realizar permanentemente simulacros de sismos en las casas e instituciones educativas pues todo lo que pasé en el país del Sol Naciente repercutiría de algún modo en el nuestro. Por su parte el alcalde del Callao, Juan Sotomayor, comentó que el día 26 de febrero se realizó un simulacro justo para prevenir este tipo de circunstancias, pero muchos hicieron caso omiso. Esto, según él, debe servir de lección para que la población tome con mayor responsabilidad estos temas de desastres naturales.
En un reporte de Prensa Chalaca publicado el 24 de febrero, Fernando Gordillo , Gerente General de Desarrollo Urbano de la Municipalidad del Callao aseguró que el puerto no soportaría una desgracia de grandes proporciones. Incluso las zonas del Sur Chalaco omo Canadá, San Judas
Tadeo y al norte los asentamientos humanos Tiwinza, Bolognesi, Daniel Alcides Carrión, Márquez, parte de Sarita Colonia y algunas zonas de Ventanilla, además de La Punta y Chucuito serían totalmente inundadas.
Recodemos que el 24 de mayo de 1940 ya hubo un maremoto que dejó 100 muertos, 2000 heridos y cinco mil casas destruidas. Así que más vale prevenir que lamentar.
sismo del país del sol naciente en los últimos 140 años; al cierre de esta edición hay cientos de fallecidos y decenas de peruanos desaparecidos.
Ante este hecho, durante la mañana se tomaron medidas debido a las posibilidades que el maremoto formado llegué al litoral peruano con gran intensidad.
A primeras horas de la mañana, el Gobierno Regional del Callao impidió el acceso de bañistas a las playas chalacas. Con el paso del tiempo, las prevenciones fueron mayores y decidieron suspender las clases de los colegios de inicial, primaria y secundaria en todo el Callao. Esta
medida fue tomada para cuidar la integridad de los más de 150 mil alumnos que asistían ese día a la escuela. Además el equipo más popular del Callao , Sport Boys, decidió suspender su entrenamiento.
El Ministerio de Salud, Óscar Ugarte, informó a los medios que se había decidido decretar en Alerta Amarilla en los hospitales de todos los departamentos de la costa en caso de cualquier emergencia. “Con esto se comprende que los hospitales tendrán el mayor número de camas
disponibles, alistarán los equipos electrógenos y de transporte. Además preparamos medios para mantenernos comunicados entre hospitales. Hay que mantener la calma, Defensa Civil y La Marina de Guerra del Perú siguen monitoreando. Ojalá que no ocurra nada”.
En La Punta y Chucuito, zonas de mayor riesgo debido a su cercanía al mar, fueron evacuadas a partir de las 3 de la mañana del mismo día.
Además se tuvo conversaciones con Edelnor para cortar la luz con el objetivo de evitar daños mayores y cortocircuitos que podía ocasionar el contacto del agua de mar con la energía eléctrica. En el caso de las personas discapacitadas y adultos mayores de la tercera edad fueron
ayudados en su desplazamiento a las zonas de refugio.
La tensión fue en aumento cuando se confirmó que habría presencia de Tsunamis en toda la costa del pacífico. Los medios internacionales informaron sobre la evacuación de los pobladores de la isla de Estados Unidos, Hawai.
Mientras en la provincia constitucional del Callao estaban en alerta. el capitán de la compañía de Bomberos número 34, Carlos Rodríguez Montañés, declaró para Prensa Chalaca: “Nosotros estamos preparados, y para ayudar a la gente toda la noche hemos monitoreado y coordinado con alerta medica, tenemos todos los implementos adecuados para cualquier
eventualidad. Además dos miembros del cuerpo tienen experiencias en desastres naturales, incluso en el huracán Katrina”.
También la Policía Aérea puso a disposición dos helicópteros para vigilar la zona desde Callao hasta Cañete mientras el mar presenta alguna anormalidad y así cuidar a la población que evacuara.
En el caso del Centro Preventivo del Niño y Adolescente La Punta número 2 se llevó a las adolescentes a un albergue en una zona de mayor seguridad debido a que se encuentran en sector de riesgo.
Con la confirmación de que las olas del tsunami no causaron grandes daños en Hawai se estipuló que aquí ocurriría en menor impacto.
El capitán de Fragata Atilio Aste, responsable del Sistema Nacional de Alerta de Tsunami de la Marina Guerra del Perú, declaró que las olas serían de aproximadamente un metro pero que en caso de puertos cerrados este tamaño podría aumentar. También se pronosticó que el maretazo
llegaría a La Punta a las ocho y cuarenta; no obstante, el estado de
alerta continuaría hasta las 9 de la noche.
Con el paso de las horas, el ambiente se tranquilizó e incluso el Vicepresidente de la Región Callao, el General Walter Mori, manifestó que no era necesario evacuar.
Sin embargo el Presidente de La República, Alan García, declaró que el Perú es un país que se encuentra casi en las antípodas de Japón, por lo que exhortó realizar permanentemente simulacros de sismos en las casas e instituciones educativas pues todo lo que pasé en el país del Sol Naciente repercutiría de algún modo en el nuestro. Por su parte el alcalde del Callao, Juan Sotomayor, comentó que el día 26 de febrero se realizó un simulacro justo para prevenir este tipo de circunstancias, pero muchos hicieron caso omiso. Esto, según él, debe servir de lección para que la población tome con mayor responsabilidad estos temas de desastres naturales.
En un reporte de Prensa Chalaca publicado el 24 de febrero, Fernando Gordillo , Gerente General de Desarrollo Urbano de la Municipalidad del Callao aseguró que el puerto no soportaría una desgracia de grandes proporciones. Incluso las zonas del Sur Chalaco omo Canadá, San Judas
Tadeo y al norte los asentamientos humanos Tiwinza, Bolognesi, Daniel Alcides Carrión, Márquez, parte de Sarita Colonia y algunas zonas de Ventanilla, además de La Punta y Chucuito serían totalmente inundadas.
Recodemos que el 24 de mayo de 1940 ya hubo un maremoto que dejó 100 muertos, 2000 heridos y cinco mil casas destruidas. Así que más vale prevenir que lamentar.
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