Su enamorada, Rosario Ponce, está actualmente en el Colca buscándolo. Se ha peinado el 50 % de la zona de búsquedaEl joven chalaco, Ciro Castillo Rojo lleva más de un mes desaparecido en el Colca. Su padre, trabajador del hospital Carrión, quiere encontrarlo vivo o muerto. En tanto que su madre, no pierde las esperanzas de poder volver tener a su hijo con ella.
El miércoles 3 de abril, Rosario Ponce López (24) y Ciro Castillo Rojo (26), estudiantes de la Universidad Agraria, aún se encontraban perdidos.
Mientras un grupo de oficiales se dirigían a los acantilados de la carretera entre Madrigal y Tapai, un segundo contingente de policías del escuadrón de emergencia de la Policía de Arequipa los buscaba en la zona de Yanque.
Según coordenadas satelitales, la última llamada telefónica que realizó Ciro a sus familiares para pedir auxilio habría provenido de las inmediaciones del pueblo de Yanque, en el Valle del Colca.
Pobladores y guías experimentados buscaban en cuevas y posibles refugios, mientras que un helicóptero de la Policía sobrevoló una zona más baja del valle.
Aparece Rosario Ponce
Diez días después de la última vez que se supo de ellos, el 13 de abril, gracias a la búsqueda de la Unidad de Salvamento de Alta Montaña de Arequipa, tres brigadas de rescate, canes entrenados y un helicóptero MI17 de la Policía, se pudo encontrar el paradero de la joven estudiante de ingeniería forestal de la Universidad Agraria de La Molina.
La joven fue encontrada en las inmediaciones del cerro Fortaleza, al pie de la cordillera del Chila. Se encontraba estable y siempre estuvo consciente, pero presentaba una severa deshidratación, problemas renales y en las retinas, debido a la exposición a los nevados. “¿Quién ganó las elecciones?” fueron las primeras palabras que le dijo a sus rescatistas.
Según contaron sus padres, Rosario se vio obligada a comer plantas silvestres de la zona, algunos insectos y tomar agua de nieve, riachuelos y lluvia, para sobrevivir.
Continúa la búsqueda
Después, miembros de Bomberos Unidos Sin Fronteras (BUSF) y la Unidad de Salvamento de Alta Montaña (USAM) continuaron con la búsqueda de Ciro, en un radio de 500 metros del lugar donde se separaron los universitarios, hallando una camiseta amarilla y ploma en la zona alta de La Fortaleza. Se presume que pertenece a Ciro.
Mientras tanto, compañeros de aula del colegio San Juan Bautista de Puno, organizaron una colecta para poder viajar a la zona y unirse a las labores de rescate. Asimismo, en Lima, 50 estudiantes de la Universidad Agraria La Molina, realizaron una vigilia al frente de la Catedral de Lima, el 15 de abril.
Dos días después, el 17 del mismo mes, el jefe policial al mando de las labores de búsqueda, de Ciro Castillo, Carlos Mateo Tueros, solicitó a la familia del joven presentar una denuncia policial por desaparición.
Eso permitiría interrogar a Rosario Ponce. Los padres del desaparecido se negaron. A la mañana siguiente, el Presidente de La República dispuso que el Ejército peruano se sume a la búsqueda de Ciro.
Como si fuera poco el sufrimiento por el que tenían que pasar los padres, además recibieron llamadas extorsionadoras que pedían dinero por la información. Incluso, el 20 de abril se generó un rumor en Twitter que manifestaba que Castillo Rojo había sido encontrado. Este fue desmentido.
El 22 de abril se informó que un poblador se comunicó con la Policía indicando que había encontrado un cadáver en el valle del Colca. El dato resultó ser falso.
El 4 de Mayo, Rosario no se presentó a rendir su manifestación ante la Fiscalía de Chiva. Su abogado dijo que tenía impedimento de salud para viajar.
Dos días después, Rosario Ponce López pasó exámenes psicológicos y médicos ante la fiscalía de Lima, como parte de la investigación que busca dar con el paradero del estudiante Ciro Castillo Rojo, perdido hace más de un mes en el Valle del Colca. “Se encuentra con un shock postraumático”, manifestó el padre de Rosario.
Finalmente, el 9 de mayo, la universitaria se presentó a la fiscalía. El presidente de la Junta de Fiscales del Ministerio Público de Arequipa, Jesús Fernández Alarcón, admitió que las diligencias por la desaparición de Ciro Castillo están enfocadas a investigar un crimen.
“Si consideramos el tiempo que ha pasado desde su desaparición, se sospecha que pudo haber la intervención de terceras personas. Vamos a realizar todas las diligencias y si hay responsables tendremos que identificarlos. Estamos investigando un crimen”, indicó. La interrogación duró 6 horas.
Ayer, Rosario Ponce López caminó hasta el mirador Cruz del Cura, del valle del Colca, acompañada de cinco policías de Alta Montaña, cuatro fiscales, entre ellos Leonel Angulo, cinco efectivos de la Comisaría de Chivay, tres de la Dirincri y un coronel. Además, junto a la universitaria estuvo su madre y su abogado, Miguel Cabrera, quien pidió a la prensa no acercarse a Ponce López.
La joven sobrevoló la zona en helicóptero y brindó detalles de los lugares que recorrió con Ciro Castillo Rojo por última vez hace más de un mes y sobrevoló la zona en un helicóptero.
Hasta ahora no se encuentra a Ciro Castillo. Según su padre, el médico cirujano del Hospital Carrión del Callao, Ciro Castillo, manifestó que se ha peinado el 50% de la zona de búsqueda de su hijo. Además de que desea encontrarlo vivo o muerto. Esperemos que esta historia tenga un final al fin.
Mientras un grupo de oficiales se dirigían a los acantilados de la carretera entre Madrigal y Tapai, un segundo contingente de policías del escuadrón de emergencia de la Policía de Arequipa los buscaba en la zona de Yanque.
Según coordenadas satelitales, la última llamada telefónica que realizó Ciro a sus familiares para pedir auxilio habría provenido de las inmediaciones del pueblo de Yanque, en el Valle del Colca.
Pobladores y guías experimentados buscaban en cuevas y posibles refugios, mientras que un helicóptero de la Policía sobrevoló una zona más baja del valle.
Aparece Rosario Ponce
Diez días después de la última vez que se supo de ellos, el 13 de abril, gracias a la búsqueda de la Unidad de Salvamento de Alta Montaña de Arequipa, tres brigadas de rescate, canes entrenados y un helicóptero MI17 de la Policía, se pudo encontrar el paradero de la joven estudiante de ingeniería forestal de la Universidad Agraria de La Molina.
La joven fue encontrada en las inmediaciones del cerro Fortaleza, al pie de la cordillera del Chila. Se encontraba estable y siempre estuvo consciente, pero presentaba una severa deshidratación, problemas renales y en las retinas, debido a la exposición a los nevados. “¿Quién ganó las elecciones?” fueron las primeras palabras que le dijo a sus rescatistas.
Según contaron sus padres, Rosario se vio obligada a comer plantas silvestres de la zona, algunos insectos y tomar agua de nieve, riachuelos y lluvia, para sobrevivir.
Continúa la búsqueda
Después, miembros de Bomberos Unidos Sin Fronteras (BUSF) y la Unidad de Salvamento de Alta Montaña (USAM) continuaron con la búsqueda de Ciro, en un radio de 500 metros del lugar donde se separaron los universitarios, hallando una camiseta amarilla y ploma en la zona alta de La Fortaleza. Se presume que pertenece a Ciro.
Mientras tanto, compañeros de aula del colegio San Juan Bautista de Puno, organizaron una colecta para poder viajar a la zona y unirse a las labores de rescate. Asimismo, en Lima, 50 estudiantes de la Universidad Agraria La Molina, realizaron una vigilia al frente de la Catedral de Lima, el 15 de abril.
Dos días después, el 17 del mismo mes, el jefe policial al mando de las labores de búsqueda, de Ciro Castillo, Carlos Mateo Tueros, solicitó a la familia del joven presentar una denuncia policial por desaparición.
Eso permitiría interrogar a Rosario Ponce. Los padres del desaparecido se negaron. A la mañana siguiente, el Presidente de La República dispuso que el Ejército peruano se sume a la búsqueda de Ciro.
Como si fuera poco el sufrimiento por el que tenían que pasar los padres, además recibieron llamadas extorsionadoras que pedían dinero por la información. Incluso, el 20 de abril se generó un rumor en Twitter que manifestaba que Castillo Rojo había sido encontrado. Este fue desmentido.
El 22 de abril se informó que un poblador se comunicó con la Policía indicando que había encontrado un cadáver en el valle del Colca. El dato resultó ser falso.
El 4 de Mayo, Rosario no se presentó a rendir su manifestación ante la Fiscalía de Chiva. Su abogado dijo que tenía impedimento de salud para viajar.
Dos días después, Rosario Ponce López pasó exámenes psicológicos y médicos ante la fiscalía de Lima, como parte de la investigación que busca dar con el paradero del estudiante Ciro Castillo Rojo, perdido hace más de un mes en el Valle del Colca. “Se encuentra con un shock postraumático”, manifestó el padre de Rosario.
Finalmente, el 9 de mayo, la universitaria se presentó a la fiscalía. El presidente de la Junta de Fiscales del Ministerio Público de Arequipa, Jesús Fernández Alarcón, admitió que las diligencias por la desaparición de Ciro Castillo están enfocadas a investigar un crimen.
“Si consideramos el tiempo que ha pasado desde su desaparición, se sospecha que pudo haber la intervención de terceras personas. Vamos a realizar todas las diligencias y si hay responsables tendremos que identificarlos. Estamos investigando un crimen”, indicó. La interrogación duró 6 horas.
Ayer, Rosario Ponce López caminó hasta el mirador Cruz del Cura, del valle del Colca, acompañada de cinco policías de Alta Montaña, cuatro fiscales, entre ellos Leonel Angulo, cinco efectivos de la Comisaría de Chivay, tres de la Dirincri y un coronel. Además, junto a la universitaria estuvo su madre y su abogado, Miguel Cabrera, quien pidió a la prensa no acercarse a Ponce López.
La joven sobrevoló la zona en helicóptero y brindó detalles de los lugares que recorrió con Ciro Castillo Rojo por última vez hace más de un mes y sobrevoló la zona en un helicóptero.
Hasta ahora no se encuentra a Ciro Castillo. Según su padre, el médico cirujano del Hospital Carrión del Callao, Ciro Castillo, manifestó que se ha peinado el 50% de la zona de búsqueda de su hijo. Además de que desea encontrarlo vivo o muerto. Esperemos que esta historia tenga un final al fin.
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