La vivienda se ubica en la cuadra 21 de la avenida Insurgentes en el
Callao y el artefacto explosivo que metió miedo entre los miembros de
esa
familia sería una bomba casera (molotov), la cual cayó sobre el techo
del
inmueble, por lo que no hubo pérdidas humanas que lamentar.
La sobrina de la familia Vásquez, Maryori Delgadillo, contó a la
policía
que este hecho sería un acto de venganza por parte de obreros de
construcción civil, pues un miembro de su familia también pertenece a
dicho gremio. Además expresó que los delincuentes partieron con
dirección
a la avenida Argentina a bordo de un automóvil statión wagon color
blanco.
Asimismo, ellos informaron que solicitarán garantías para su vida,
Mientras tanto, este caso viene siendo investigado por efectivos de la
comisaría de La Legua, allí indicaron que se trataría de un ajuste de
cuentas.
Cabe destacar que esta no sería la primera vez que delincuentes
utilizan
esta modalidad para amedrentar a sus víctimas, pues como se recuerda
hace
no menos de un mes en la calle Constitución en el cercado del Callao,
también se arrojó una bomba molotov a una casa porque la familia no
quiso
pagar la suma de S/.100 mil, como parte del cobro de una presunta
extorsión.
Los amigos de lo ajeno le sigan ganando terreno a la Policía Nacional,
todo indicaría que la guerra por cupos de construcción civil podría
cobrar una nueva víctima en cuestión de horas.
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