Tenía muchas deudas y preparó yogurt con raticida para ambos, pero él sobrevivió
Penosa decisión. Agobiada por problemas económicos, una mujer se suicidó dentro de un hostal ingiriendo un potente raticida mezclado con yogurt, preparado mortal que también le dio a beber a su menor hijo, quien actualmente se encuentra delicado en un nosocomio local.
El cuerpo de María Tello Quiroz fue encontrado ya sin vida por los trabajadores del establecimiento. Aunque fue muy tarde para ella, el pequeño de nueve años aún tenía signos vitales, por lo cual fue llevado inmediatamente al hospital Cayetano Heredia donde se viene recuperando.
Según informaron los familiares, la mujer salió el último jueves de su domicilio ubicado en el distrito de Ventanilla con la excusa de visitar a sus hermanos, sin embargo, nunca llegó donde ellos. En su perturbada mente ya tenía planeado como acabar con su vida y la de su hijo.
Como dieron a conocer, habría tomado la fatal decisión debido a la serie de deudas que mantiene con entidades bancarias. De ellas no tenía conocimiento su esposo y por esa razón se vio acorralada a tomar esta siniestra salida.
“Yo le preguntaba para qué utilizas esa plata, para que sacas tanto, pero ella me decía ‘eso queda para mí nomás, eso solamente lo sé yo’” indicó la cuñada de la víctima quien se mostró extrañada por las deudas acumuladas por la mujer en los últimos meses.
El esposo de la mujer, quien no se identificó, mostró su dolor en los exteriores de la Morgue Central de Lima, donde fue llevado el cuerpo para realizarle los exámenes de ley. Él no se pronunció sobre los compromisos económicos asumidos ella.
Por otro lado, según trascendió, el menor seguirá internado por un par de días más mientras los galenos estabilizan su salud y por ello no estaría en el sepelio de su madre. Según se informo, él fue encontrado aún con vida porque los trabajadores del hostal lo escucharon lamentarse y vomitar. De inmediato se acercaron a ver qué pasaba.
La mujer será velada en el Callao y lo más probable es que sea sepultada en el cementerio Baquíjano y Carrillo del mismo distrito.
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