Un promedio de 39 detenidos y cientos de heridos fue el saldo de esta masacre entre policías e invasores de terreno
Un muerto, 39 detenidos e innumerables heridos fue el resultado de una
batalla campal que tuvo como escenario el sector “Cueva de los Tallos”,
en Ventanilla, todo ello a consecuencia de la invasión de terrenos en
dicha jurisdicción. Cientos de efectivos policiales acompañados de
unidades de asalto y vehículos blindados tuvieron que ser utilizados
para
erradicar a los vándalos.
Mik Anardo Aliaga (22) fue la persona que murió tras ser víctima de un
impacto de bala que le perforó el tórax.
Para colmo el vehículo que lo
trasladaba hasta el nosocomio de Puente Piedra chocó contra un poste en
el kilómetro 34 de la Panamericana Norte.
Según la manifestación de los moradores de Ventanilla, el joven recibió
un proyectil en el pecho, como si los efectivos policiales le hubieran
disparado a quemarropa. Mik Anardo no resistió el impacto y murio a los
pocos segundos.
Luego de un intenso operativo los invasores fueron erradicados del
terreno, asimismo se pudo conocer que los 39 detenidos serán
denunciados
a través de la seguridad del estado. Un fuerte contingente se quedo en
el
lugar resguardando la zona para evitar otro intento de invasión.
La invasión
Como se recuerda la invasión empezó el pasado miércoles, cuando 2 mil
700
personas provistas de palos y esteras se posicionaron de 70 mil metros
de
terreno baldío.
Al siguiente día acudieron aproximadamente 600 efectivos policiales y
150 serenos pero poco o nada pudieron hacer ante la turba de
manifestantes que exigían un lote de terreno donde vivir. Se tuvo
conocimiento que entre los revoltosos más de uno tenia armas de fuego
pudiendo causar una masacre.
Tras los hechos el jefe de seguridad ciudadana de Ventanilla, Jorge
Moreno también se pronunció informando que no podrían intervenir en
estos problemas ya que se trataba de una propiedad privada, por lo
tanto
ellos tienen que mantenerse al margen ya que solo velan por la
seguridad de los pobladores, pronunció.
Jorge Moreno aclaró que la presencia de los serenos se debía al
traslado de los heridos, ya que como se sabe los enfrentamientos han
dañado a más de uno, dejando tres heridos de bala, entre ellos dos
efectivos policiales y un civil.
A lo largo de los enfrentamientos se pudo apreciar la presencia de
jóvenes y niños, los cuales quedaron afectados por causa de los gases
lacrimógenos, pero la peor parte la llevaron los colegas periodistas
que
no solo tuvieron que esquivar la lluvia de piedras que diariamente
arrojaban los vándalos, sino los múltiples robos y saqueos a los que
fueron sometidos.
Cabe destacar que los manifestantes al mismo estilo de los vándalos
también dañaron equipo de último tecnología de los canales de prensa.
Hasta el pasado viernes los disturbios por adquirir un lote no tenían
cuando acabar.
El inicio del fin
Todo tiene un inicio, y esta historia no es la excepción, esto data
desde hace 45 años cuando un terreno de unos 70 mil metros
aproximadamente fue comprado por la señora María Luisa Carrillo de
Albornoz, pero el mismo se encontraba abandonado hasta este entonces.
La familia en su momento mencionó que no permitirá la invasión de estas
personas, Julio César Lynch (55) hijo de María Carrillo expresó que
planeaba iniciar en octubre próximo la construcción de un conjunto
habitacional.
Ante ello, los invasores manifestaban que querían comprarle el terreno
a
la familia Lynch pero jamás explicaron como iban a cancelar sus deudas
ni
mucho menos cuando sería la fecha que iban a realizarlo.
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