AVENIDA GAMBETTA NO DURARÍA REPARADA MÁS DE 3 AÑOS

El MEF sólo aprobó presupuesto para ‘parchar’ con asfalto la vía transitada por carga pesada

Se caracteriza por sus profundos huecos, basura, contaminación, polvo, falta de iluminación y señalización. La avenida Néstor Gambetta, una estratégica vía que debiera ser el reflejo del crecimiento del Callao y de las exportaciones, pareciera no despertar el adecuado interés en las autoridades.

La obra de asfaltado que se viene ejecutando en esta arteria, principal acceso al primer puerto del país, podría generar pérdidas millonarias ya que, según los expertos, el asfalto es un material que no soportará el diario tránsito de 8 mil tráilers de hasta 40 toneladas de carga cada uno.

Inicialmente el Consorcio ‘Nueva Gambetta’, integrado por la compañía brasileña ‘Andrade Gutiérrez’ y la Región Callao, estaba de acuerdo en ejecutar la obra con concreto, lo cual garantizaba una vía libre de huecos en un periodo de 30 a 50 años, sin embargo, el Ministerio de Economía decidió aprobar el presupuesto, pero para trabajar con asfalto.

Fuentes consultadas por Prensa Chalaca dieron a conocer una información desconocida por muchos. Según dijeron, entre las ventajas de usar una pista de cemento, está la gran durabilidad de la misma. Al contrario, las vías de asfalto necesitan una mayor y mejor atención pues deben ser selladas al menos una vez cada 3 ó 5 años para evitar las grietas.

Hoy especialistas aseguran que los 355 millones de dólares de inversión están en riesgo. Con el material a usar en la vía, cada 2 ó 3 años se volverán a abrir los huecos, lo cual afectará tremendamente la actividad comercial del primer puerto.

Faltaba más
Sin embargo, los problemas actuales de la ‘Gambetta’ no sólo se resumen en la crítica situación de la pista central, sino también en sus vías alternas, que son angostas para los vehículos pesados, los de mayor tránsito en la zona.

Además de ello, aún falta una oportuna señalización para los cruces peatonales y vehiculares, paraderos de transporte público y la implementación de semáforos, importantes para evitar accidentes como los ya ocurridos.

A ejecutar
Cabe recordar que el Consorcio ‘Nueva Gambetta’ es el encargado de realizar las obras correspondientes al proyecto, con un costo de 513 millones 979 mil dólares.

Los 28 kilómetros de la arteria se inician en el intercambio vial de Zapallal, en la Panamericana Norte, y terminan en el ingreso al Terminal Marítimo del Callao, por el Muelle Sur. Según estudios realizados, más de 2 millones de personas serán beneficiadas con el uso de esta vía.

Los trabajos previstos están divididos en 5 tramos. El primero de ellos se inicia en el punto antes mencionado (km 00), y se extiende hasta llegar al kilómetro 11.

Las obras incluyen, además del asfaltado de 2 carriles por calzada (el de ida y el de vuelta), la construcción de plazoletas, puentes peatonales y vehiculares, viaductos, paraderos, veredas, bermas, señalización y vías auxiliares. Además, el tratamiento de interferencias, alumbrado y semaforización.

El segundo tramo va desde el kilómetro 11, hasta el Ovalo 200 millas (km 19), con la ampliación de la vía a 3 carriles por pista, construcción y rehabilitación de rutas auxiliares, viaductos sobre el río Chillón (para peatonales y autos), construcción de distribuidores viales, además de trabajos complementarios, entre otros.

Desde el Ovalo 200 millas hasta el kilómetro 21.5, frente a la empresa operadora logística Ransa, en lo que constituye la tercera etapa, se construirá un distribuidor vial, además de otras obras similares a las fases anteriores.

El cuarto tramo se extiende del kilómetro 21.5 hasta el Ovalo Centenario, en la intersección con la avenida Argentina (km.25), con labores equivalentes a las anteriores, igual que el quinto corredor, que va desde el cruce de las avenidas Gambetta y Atalaya (km.000) hasta el Terminal Marítimo del Muelle Sur (km.2.9).

Según se informó, este jueves se inaugurará la tercera etapa de los trabajos, pero lejos de ser un aliciente, es causa de preocupación pues, al fin de la obra completa, podremos encontrarnos con un gran ‘ídolo de barro’, el cual, a pesar de sus supuestos grandes beneficios, se desmoronaría en pocos años.