AHORA EXTORSIONADORES DE CONSTRUCCIÓN CIVIL RONDAN VIVIENDAS

Falsos “obreros” piden cupos a vecinos de La Perla para dejarlos construir en paz

El cambio de pistolas en lugar de ladrillos entre falsos obreros de
construcción civil viene generando alarma entre miles de chalacos.
Esta vez el peligro mantiene en zozobra a los vecinos de La Perla,
quienes aseguran que ahora los extorsionadores rondan las casas donde se
hacen construcciones.

“Prensa Chalaca” llegó hasta las cuadras 10, 11 y 12 del jirón José
Olaya en ese distrito, donde se viene levantando el segundo piso de más
de una vivienda, y son los vecinos quienes viven en carne propia las
desafiantes amenazas por parte de seudos obreros de construcción civil.

“Es el colmo, ahora uno no puede hacer reparaciones en su propia casa
porque vienen sujetos ajenos y con pistolas solicitan cupos de trabajo,
no dejan trabajar y rondan las calles, yo he tenido que darles un
sencillo para que se vayan, pero vienen casi a diario”, dijo la vecina
Teresa Preciado.

Similar situación viven varias de las familias de los alrededores,
quienes ahora dudan de, si fue o no, una buena idea construir o ampliar
sus predios ante la constante presencia de inescrupulosos que se
aprovechan de la situación para amenazar a cambio de cupos laborales y
hasta dinero, con tal de dejarlos trabajar en paz.

Según la policía, el dinero que cobran es algo que ellos mismos
denominan, “paz laboral”, la misma que es una práctica que hasta hace
unos meses solo se realizaba en obras de mediana o gran envergadura.
Pero, ante la notoria desaceleración de las construcciones en la
capital, los extorsionadores se ven en la necesidad de aplicarlo a la
ciudadanía.

Sin embargo este no sería el único caso en el que actúan estos malos
“obreros”, sino que ahora son estos propios sujetos quienes alquilan sus
armas de fuego a otros delincuentes para cometer sus delitos, así lo dio
a conocer un agente de inteligencia del Callao.

La policía tiene identificados a los cabecillas de los grupos de falsos
obreros que extorsionan a los operarios de construcción, pero no se toma
la decisión de actuar para apresarlos ya que todavía existen leyes
débiles.