Hay chapas, apodos y motes que duelen. Esto lo ha recogido muy bien la Universidad Nacional Mayor de San Marcos en un reciente estudio: Alrededor del 50% de escolares de los colegios públicos y privados fue víctima de bullying, y la mayoría mencionó a los sobrenombres como las agresiones más frecuentes.Aunque hubo hasta siete diferentes tipos de agresiones que se encontraron asociadas al bullying, se mencionó que la colocación de apodos fue la más frecuente, hasta en un 91% de los casos.
Las otras formas de agresión relatadas fueron los golpes, el acoso, escupir al compañero, discriminarlo, despojarlo de algún objeto, llamarlo homosexual y atacarlo vía email.
El estudio también reveló que el 34% de los agredidos no comunicó los hechos, y que el 64% de los compañeros son observadores y no tienen interés en defender a las víctimas. Además, alrededor del 25% de los padres no reacciona ni protege a las víctimas. Los agredidos se vuelven depresivos e inseguros, con baja autoestima
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